El Reverendo Padre Minas construyó este monasterio entre 1572 y 1595, en tiempos del Patriarca Jeremiah II, sobre una pintoresca cima a las afueras de Neohori. Al principio estuvo habitado por monjes, aunque en 1932 se convirtió en un monasterio de monjas.
Durante la ocupación turca, mantuvo un colegio y una importante librería. Fue en este periodo cuando un episodio lo llevó a formar parte de la historia mundial: durante el holocausto de 1822, decenas de habitantes de Chios fueron quemados en la capilla y el patio del monasterio por los turcos. Hoy en día todavía quedan restos de la mascare en las piedras manchadas de sangre de la capilla, y en el mausoleo de los 40 mártires del patio se conservan los huesos de muchas de las víctimas.
De las 35 monjas que cuidaban del monasterio y se dedicaban a la artesanía, la hagiografía y el bordado de vestiduras eclesiásticas, hoy tan sólo quedan 11.